lunes, 7 de mayo de 2018

Visita de Íñigo Núñez

Hoy, a la seño le toca escribir una entrada en el blog muy emotiva, difícil y bonita. Emotiva por las emociones de las que fui testigo y que tuve la ocasión de compartir con mis niños en el antes, el durante y el después de esta especial visita. Difícil, porque cuando se presencia tan auténtica fiesta del cariño y la emoción, es casi imposible expresar lo que se vive o se siente. Y bonita, porque entre las cuatro paredes de mi clase, junto a mis veintisiete estrellas de luz, solo pueden pasar cosas tan bellas como esta...

Todos sabíamos lo especial que sería el reencuentro con nuestro amigo Íñigo Núñez en el cole. Ese autor que conocimos trabajando Ñaak el espantapájaros cuando estábamos en primero, y que desde entonces no hemos dejado de disfrutar tampoco como actor y como amigo. Y es que Íñigo, con su singular talento unido a su fascinante calidad humana, se convirtió desde el primer momento para nuestro grupo en un referente artístico del que nos hemos valido durante estos años para aprender. Cualquier trabajo de clase se ha convertido en un disfrute absoluto cuando ha sido para él: diálogos teatrales, cartas, postales, poemas, carteles... Y él, siempre, nos ha respondido con una enorme sonrisa haciendo de cada vídeo o mensaje para nosotros un enorme gesto de amor.

Tres veces nos ha visitado Íñigo en el cole. La primera, en junio de 2015, a partir del trabajo que realizamos con Ñaak el espantapajaros. La segunda, en diciembre de 2017, para interpretar junto a nosotros nuestros diálogos teatrales. Y la tercera, el pasado 26 de abril, para recibir todo el cariño que le tenemos en forma de recuerdo que queremos que conserve para siempre, y de divertidos carteles de teatro donde él es el protagonista. Pero alternando estas visitas, también hemos tenido ocasión de ir a verlo al teatro o comunicarnos con él utilizando todos los medios a nuestro alcance, lo que sin duda, desde el primer momento, alimentó el vínculo originado haciéndolo crecer y crecer... Tan importante llegó a ser para nosotros, que no dudamos en añadir su propia etiqueta en el blog. Así, tenemos una etiqueta para Íñigo, y otra para Ñaak.

No podemos tener palabras suficientes de agradecimiento ni admiración por la dedicación que Íñigo nos ha prestado todo este tiempo, pero sí podemos recordar esta nueva visita compartiéndola con todos nuestros amigos a través de los carteles de teatro que le hicimos y de un vídeo que le dedicamos con todo nuestro cariño (las dedicatorias personales que también le entregamos nos las reservamos para nosotros). Es una forma más de decirle gracias y de recordarle que lo sentimos como parte de nuestro equipo. No hay abrazo "colectivo" suficiente para expresarle todo nuestro amor. Gracias, Íñigo. Esperamos que te guste el vídeo y que te ayude a recordarnos siempre.

Por otra parte, desde aquí, la seño quiere manifestar a sus veintisietes estrellitas y a sus familias, la inigualable y valiosa sensación que produce ver, desde el cuadro de mandos, tanto respeto, grandeza, entusiasmo, ilusión, superación, crecimiento, generosidad, empatía y amor, en aquellos a los que tanto quiero. Y es que todas estas son palabras insuficientes para demostrar mi disfrute al observar aquel día a "mis niños", con Íñigo, convertidos en las personas más grandes y bellas que se pueda imaginar... Gracias, equipo, sois los mejores.

Ahora sí, os dejamos con nuestros carteles de teatro y con el vídeo de la visita de Íñigo Núñez a nuestra clase. ¡Esperamos que los disfrutéis!


CARTELES DE TEATRO


VÍDEO DE LA VISITA

No hay comentarios:

Publicar un comentario